La Revolución Industrial

1   ¿QUÉ ES?

La Revolución Industrial, es el proceso de evolución que conduce a una sociedad desde una economía agrícola tradicional hasta otra caracterizada por procesos de producción mecanizados para fabricar bienes a gran escala. Este proceso se produce en distintas épocas dependiendo de cada país. Para los historiadores, el término Revolución Industrial es utilizado exclusivamente para comentar los cambios producidos en Inglaterra desde finales del siglo XVIII; para referirse a su expansión hacia otros países se refieren a la industrialización o desarrollo industrial de los mismos.

Algunos autores para referirse al desarrollo capitalista en el último tercio del siglo XX, con nuevas organizaciones empresariales (trusts, holdings, cárteles), nuevas fuentes energéticas (electricidad, petróleo) y nuevos sistemas de financiación hablan de Segunda Revolución Industrial.

2 LA EXPERIENCIA BRITÁNICA

La primera Revolución Industrial tuvo lugar en Reino Unido a finales del siglo XVIII; supuso una profunda transformación en la economía y sociedad británicas. Los factores causantes podemos encontrarlos en:

  • La revolución agrícola (sistema Norfolk, nuevos cultivos, nuevas herramientas, abonos, leyes de cercamiento...): proporcionó excedentes.
  • Explosión demográfica: Se redujo la mortalidad (higiene, alimentación, avances médicos...), la población creció, aumentando la demanda y proporcionando mano de obra a la industria.
  • Aparición de nuevas fuentes de energía (hidráulica, carbón...) y máquinas (máquina de vapor, Watt 1769) http://sosiales.blogspot.com/2010/11/evolucion-de-la-maquina-de-vapor-y.html
  • Mejoras en los transportes, no solo la red de caminos, canales y puertos, sino más tarde el barco de vapor y la red ferroviaria.
  • Impulso del mercado: gracias a la demanda y los transportes, podían distribuirse por los mercados coloniales e interiores.

Los cambios más inmediatos se produjeron en los procesos de producción: qué, cómo y dónde se producía. El trabajo se trasladó de la fabricación de productos primarios a la de bienes manufacturados y servicios. El número de productos manufacturados creció de forma espectacular gracias al aumento de la eficacia técnica. En parte, el crecimiento de la productividad se produjo por la aplicación sistemática de nuevos conocimientos tecnológicos y gracias a una mayor experiencia productiva, que también favoreció la creación de grandes empresas en unas áreas geográficas reducidas. Así, la Revolución Industrial tuvo como consecuencia una mayor urbanización y, por tanto, procesos migratorios desde las zonas rurales a las zonas urbanas.

Se puede afirmar que los cambios más importantes afectaron a la organización del proceso productivo, que podemos llamar sistema fabril. Las fábricas aumentaron en tamaño y modificaron su estructura organizativa. En general, la producción empezó a realizarse en grandes empresas o fábricas en vez de pequeños talleres domésticos y artesanales, y aumentó la especialización laboral. Su desarrollo dependía de una utilización intensiva del capital y de las fábricas y maquinarias destinadas a aumentar la eficiencia productiva. La aparición de nuevas máquinas y herramientas de trabajo especializadas permitió que los trabajadores produjeran más bienes que antes y que la experiencia adquirida utilizando una máquina o herramienta aumentara la productividad y la tendencia hacia una mayor especialización en un proceso acumulativo.

Lo dicho anteriormente se aplicó primeramente a la industria textil, con una nueva materia prima: el algodón, y un mecanización constante, primero del tejido (lanzadera volante) y luego del hilado (spinning Jenny, water frame, mule Jenny a vapor), hasta inventarse el telar mecánico por Cartwright en 1786.


Esta industria arrastró a su vez a otros sectores, como el químico (tintes, blanqueantes...) y el siderometalúrgico (máquinas).

La demanda de máquinas, la construcción, y finalmente el ferrocarril (1829), hicieron que el sector siderúrgico fuera otro de los más innovadores y desarrollados. La innovación se produjo primero en el combustible (carbón de coque, Darby 1709) y luego en la técnica de producción del hierro forjado mediante el pudelado y laminado (Cort, 1783), hasta la aplicación en 1856 del convertidor Bessemer para la producción de acero.

3 LA EXPANSIÓN DEL PROCESO INDUSTRIALIZADOR

Gran Bretaña no fue el único país que experimentó una Revolución Industrial. Los estudiosos parecen estar de acuerdo en que en Europa, Francia, Bélgica y Alemania experimentaron procesos parecidos a mediados del siglo XIX; EE. UU. y Japón se industrializaron también en el mundo extraeuropeo. Otras regiones europeas como España, Italia o el Este de Europa se industrializaron de forma incompleta y más tardíamente.

4   ¿MEJORÓ LA INDUSTRIALIZACIÓN LAS CONDICIONES DE VIDA?

La mayor especialización y la aplicación de bienes de capital a la producción industrial creó nuevas clases sociales en función de quien contratara y tuviera la propiedad sobre los medios de producción. El papel de individuos propietarios de los medios de producción o empresarios le correspondió a  la burguesía. Cuando invierten capital en una empresa sin participar directamente en ella se denominan capitalistas. Aquellos que no poseían los medios de producción y aportaban su trabajo, conformaban el proletariado industrial.

Por definición, la industrialización aumenta la renta per cápita nacional. También implica cambios en la distribución de la misma, en las condiciones de vida y laborales y en los valores sociales. La Revolución Industrial supuso, al principio, una reducción del poder adquisitivo de los trabajadores y una pérdida de calidad en su nivel de vida. Más tarde, se tradujo en un aumento de la calidad de vida de toda la población del país industrializado. Estos aspectos siguen siendo objeto de importantes trabajos de investigación.

5   UN NUEVO SISTEMA ECONÓMICO

El proceso industrializador estuvo íntimamente ligado a una nueva doctrina económica, el liberalismo, y dio lugar a una nuevo sistema económico: el capitalismo.

El liberalismo propugnaba que:

  • El interés particular es el motor del desarrollo
  • El equilibrio de intereses contrapuestos mediante la ley de la oferta y la demanda (la "mano invisible" que regula precios, oferta, demanda...)
  • La libre competencia de las empresas
  • La no intervención del Estado
  • Librecambio o libre comercio: las mercancías deben circular libremente entre países, sin aranceles proteccionistas
Así, en el sistema capitalista podemos ver el siguiente funcionamiento:
  • Propiedad privada de los medios de producción, en manos de la burguesía capitalista
  • El trabajo lo aportan los jornaleros asalariados (proletariado)
  • Libre iniciativa, buscando el máximo beneficio, sin intervención del Estado
  • Existencia de crisis periódicas por los desajustes entre oferta y demanda


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